Una de nuestras enriquecedoras propuestas de verano fue el campo solidario en Salamanca. En esta experiencia, un grupo de jóvenes se unió para participar en diversos voluntariados, dedicando su tiempo y esfuerzo a ayudar a los demás.
Además de las actividades solidarias, los participantes formaron una comunidad de fe, compartiendo momentos de reflexión y crecimiento espiritual.
Esta vivencia no solo fortaleció su compromiso social, sino también su vínculo con la fe y los valores de la comunidad Dehoniana.


